“La primera virtud del conocimiento es la capacidad de enfrentarse a lo que no es
evidente”
Lacan
Conocer la realidad en su esencia es un proceso muy interesante y que, a menudo, lleva mucho tiempo. Es un proceso de purificación de nuestros prejuicios y memoria. Si nos enfrentamos a lo nuevo, y cada día es nuevo, simplemente a partir de lo que ya sabemos o creemos saber, ¿como vamos a aprender algo nuevo?
El conocimiento de uno mismo, seguramente el más importante, pasa por el mismo proceso. Lo que no conozco y no comprendo de mi mismo, es mucho más de lo que ya sé.
Enfrentarse a todo este mundo desconocido requiere tiempo y valentía. Pero es un paso esencial.
Lo mejor, lo sano, lo bello casi siempre no son evidentes a primera vista. Así como las raíces de nuestros malestares y egoísmos...
¿Puede dedicar un tiempo cada día a enfrentar lo que no es evidente?
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